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¿A dónde vas? – Le preguntó el Destino al Caminante.
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A donde yo escoja – Le contestó con cierta
irritabilidad.
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¡Qué incrédulo! ¿No sabes que yo soy quien crea los
caminos? – Le dijo socarronamente.
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Sí, pero soy yo quién escoge cómo caminarlos, en esto,
Tú, no tienes ningún poder sobre Mí – Le espetó el Caminante con educación
solapada.
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Por eso somos UNO – Categorizó el Destino.
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No estoy de acuerdo – Dijo casi para sí mismo.
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¿Ah no? Tu sin mí, no tendrías camino que andar, y yo
sin ti, no tendría quien anduviera. El uno, no existiría sin el otro – Le explicó
el Destino.
Y el caminante, tras unos
segundos de reflexión, prosiguió su camino.
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| Estación de tren |
20/03/2018
Foto publicada en National Geographic
Alfonso B. C.